Formoso fue un antiguo Papa de Italia entre el año 891 y 896 después de Cristo.
El Papa Formoso, destacó por ser conflictivo a la hora de coronar emperadores. Coronó emperador a Arnulfo de Baviera como emperador del Sacro Imperio Romano, dicho cargo enfadó a Lamberto de Espoleto que era aspirante a la corona.

Formoso llevaba muerto nueve meses, fue cuando Lamberto ya gobernando exigió al Papa Esteban VI desenterrar a Formoso y juzgarlo muerto o dicho de otra manera, de esqueleto presente. Con vestimenta sagrada y atado a la silla a la que estaba sentado se le comenzó a interrogar, incluso aunque suene a locura, se le puso un abogado defensor.
Se le acusó de todo habido y por haber y fue visto para sentencia. Todo lo que escribió Formoso fue quemado, sus ropajes sagrados fueron quitados de su cadáver, se le cortaron los 3 dedos de la mano con los que hacía bendiciones, se quemaron y sus cenizas fueron al rio Tíber.
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